Situación Crítica

 

Estamos en una situación crítica. Protestas, las carreteras bloqueadas. La distribución comercial desarticulada. El parlamento crispado. Tiendas vacías. Fabricas cerrando. Ganaderos tirando la leche de las vacas,… Todo esto en una crisis global. En teoría habrá un paquete de medidas para la crisis éste próximo martes. Felipe Gonzalez reclama los pactos de la Moncloa para esta situación y, Ramón Tamames propone en primera instancia unos paquetes de medidas para la crisis.

Consistirían en limitar los precios de la energía, de los gasóleos (volviendo a los precios iniciales antes de la crisis) por un periodo de 3 a 6 meses.  Hay que hacer una previsión y será un coste que habrá que calcular y con el permiso de la Unión Europea que puede que, lo consientan ésta vez, debido a la situación.

Hay que vigilar las rentas y los salarios ya que la inflación puede llegar a los dos dígitos. Al igual con las pensiones. Sobre los impuestos, del 21% habría que bajarlo al 15%. En el mercado laboral vuelta a los ERTEs y contrato especial de crisis que habrá que idear para dar una flexibilidad de todo esto (Ramón).

 

¿Solucionaría realmente el problema la fijación de precios?. Las personas no han podido protestar por la pandemia. En este tiempo se ha acumulado unas perdidas en el sector privado de la economía, en los que son, las pequeñas y medianas empresas de muchos sectores. Nos han venido unos shocks de incrementos de precio en las energéticas que engloban al gas, petroleo, electricidad,… Se rigidizando  la economía sin permitir que se ajustara por sí misma. No han llegado nunca las ayudas. Estas ayudas del gobierno muchas no han llegado . La banca había reaccionado y sí había permitido llegar estos préstamos ICO. Todo este acumulado recoge muchos sectores que están en pérdidas. No necesitan más intervención ni administración. Lo único que necesitan son que estas energías sean más baratas. Bajar los impuestos de las eléctricas, de la energía, del gas, de los hidrocarburos. Como ya han hecho muchos países de la Unión Europea pero que nosotros al parecer, no lo vemos tan claro (Rubén).

 

Si no hay una bajada de precios efectivos para el transporte, la industria del gas y otras eléctricas, no salvaos la crisis. No hay tiempo para una bajada de impuestos. De hacer esto, se debería esperar al próximo trimestre y eso sería esperar demasiado.

La UE puede permitir excepcionalmente una bajada de precios subvencionada debidamente. Si esto no se hace, no hay energía no hay transporte. Si no hay transporte, se ahoga la economía. La crisis es energética ante todo. Podemos entrar en una situación de cierre de empresas que nos puede llevar a una situación muy drástica. Mucho más que la vivida por la pandemia (Ramón).

 

Se debe reconocer que estamos en una situación extraordinaria. Todos los acontecimientos que están sucediendo están generando unos niveles muy altos de inflación. La situación es crítica y hay que ver qué hacer para acotar los efectos de esta crisis. La inflación una vez se desboca, es muy difícil controlarla. Hay que reducir las estímulos o de lo contrario, la economía puede correr un gran riesgo (Carlos).

 

 

Limitar los precios de la energía, trabajar en levantar las rentas salariales, rebajar drásticamente impuestos como el IVA al 15% y en el lado laboral, volver a los ERTEs. Estos son los puntos que Ramón Tamames considera que son las medidas necesarias para rebajar los efectos negativos que todos los acontecimientos actuales están ocasionando.

Hay que poner un tope a los precios del gas y de los derivados del petróleo.  Debemos recordar que los pactos de la Moncloa, hizo una previsión de una inflación que había en Octubre del año 1977. Había una previsión del aumento de un 26% de los precios a nivel general. Se propuso para el año siguiente una reducción de un 4%, es decir, rebajar a un 22% la inflación. Los efectos de lo que propusieron fueron tan efectivos que lograron bajar, no a un 22%, sino a un 19%. Un impacto como el de bajar los precios de la energía, puede reactivar todos los sectores de la economía. Qué va a hacer el gobierno el martes? Lo que vemos es que todavía no se han sentado en la mesa con el sector del transporte lo cual es muy preocupante (Ramón).

 

La economía española esta creciendo mucho menos de lo que debería y no se ha recuperado ya que nos mantenemos en un 60% de los niveles del 2019. Si se baja el impuesto de hidrocarburos a la mitad, puede que permita 15 céntimos en la bajada del precio por litro de la gasolina y en el gas. Deflactar la inflación de la tarifa del IRPF porque le está generando 10.000 millones de ingresos más al Estado a través del IVA y del IRPF se debería de hacer todos los años.

Subir los salarios sin subir la productividad, especialmente en el estado actual de las empresas, no es lo más adecuado porque puede que las empresas no lo soporten. Alargar la laxitud de la política monetaria, nos puede ayudar algo, pero no es suficiente.

Además, y como bien dice Ramón, es muy absurdo frente a las medidas que está tomando el gobierno, no tener en la mesa a quien dirige la huelga de transportes. No tiene ningún sentido. Se nos olvida la agricultura y otros sectores. Al gobierno se le ha ido la percepción de la calle de las manos. No está entendiendo la situación y no sabe responder porque parece ser que no entienden que las empresas no puede trabajar a pérdidas. Que las empresas están cerrando. Que la situación económica de España es dramática. Hemos estado dos años silenciados por las mascarillas, pero esto no significa que la gente estuviera contenta y ahora, la gente se queja. El gobierno ha estado gastando todo el dinero en el sector público de la economía y se le ha olvidado que la vaca que ordeña todos los días, se llama economía privada y es la que produce el dinero y es la que se ha perjudicado porque se ha querido para eliminar la clase media y se ha hecho por un motivo ideológico. Ahora, está hecha polvo. Es la consecuencia de la política del gobierno (Rubén).

 

Si el gobierno lo que prometo al sector de transportes son medidas que lo que le aporta es reducir pérdidas pero no solventarlas, pues no les convences y no salen. Es algo totalmente razonable (Carlos).

 

Lo que hay que tener en cuenta es que la producción no se puede parar. La mayoría de los empresarios prefieren estar en pérdidas una temporada que abandonar a su clientela. La claves está en la energía y hay que llegar a una reducción muy importante y poner de nuevo en marcha el transporte. La regulación es lo que debemos instaurar (ramón).